Don Florentino Pérez realizó, con motivo del acto de entrega de insignias a los socios más veteranos, un discurso que enlazó con la actualidad futbolística. El texto lo encontrarán íntegro en este enlace de As:
Lo más destacado, en términos informativos, fue el siguiente párrafo:
Desde hace muchos años, esta institución hace gala de lo que denominamos 'señorío'. Señorío es reconocer los méritos del adversario. Pero señorío también es defender lo que creemos justo, y señorío también es denunciar aquellos comportamientos irregulares, bien sea dentro o fuera de la institución. Defender al Real Madrid de lo que creemos que es injusto, irregular y arbitrario también es madridismo. Y eso es, precisamente, lo que hace nuestro entrenador José Mourinho. Lo que dice José Mourinho también es madridismo.
El vídeo del párrafo en cuestión está aquí:
Estas declaraciones han hecho correr ríos de tinta. Unos a favor, otros en contra. Permítanme expresar también el punto de vista de un socio:
a) Esto es lo que cualquier presidente del Real Madrid haría. De hecho, es lo que don Santiago habría hecho. Por lo tanto, en esta ocasión don Florentino ha estado a la altura.
b) Algunos consideran que se trata de un patinazo porque ni el propio Presidente se cree lo que él mismo ha dicho (así, la columna “Mis Balonazos” con Roberto Gómez, según el cual “me sorprende hasta la estupefacción la defensa de Florentino Pérez. Conociendo como conozco al presidente del Real Madrid, que diga que Mourinho ejemplifica el señorío del club es una boutade de cara a la galería porque Florentino no lo piensa”). Quizás, pero no ha sido contradictorio en sus declaraciones hasta ahora. De haberlo sido, entonces se le podría dar la razón a estos periodistas de los que humildemente discrepo. En este caso, la línea de comunicación es coherente y es sólida.
c) Otro tema es que llega un pelín tarde, aunque a tiempo para el partido del Hércules. Podría haber sido más contundente desde otros estamentos del club, tomar la bandera del entrenador y defenderlo. Quizás se ha echado en falta a Jorge Valdano ya que este sí es su rol. Parece como si en este caso el Presidente hubiese tenido que sustituir a Valdano en el ingrato rol de defender lo indefendible. Pero es que no queda más remedio, había que defender al entrenador.
d) Algunos pensarán con razón, qué pena que no hubiese hecho lo mismo con Messina, haberle apoyado más. Pues quizás, pero ya es tarde para lamentaciones.
e) Y sobre todo, lo más importante: esto es un patinazo de comunicación que comienza con el entrenador. Una vez cometido el error, hay que apoyar al entrenador porque es más grave no apoyarle que desdecirle. Ahora bien, habría que haber evitado el error en primer lugar. El Real Madrid no puede estar de víctima todo el día. Parecemos el Barcelona de hace 20 años. Creo que en esto el entrenador ha estado francamente equivocado y creo que, de nuevo, no se le ha explicado del todo bien lo que es ser del Real Madrid. Y aquí la responsabilidad vuelve a la Junta Directiva y a Jorge Valdano. Se encuentran achicando agua porque no taparon el agujero en su momento. Atención porque no será la última.
f) De cara adentro, es esencial que el director general (Jorge Valdano) y/o el presidente le pongan negro sobre blanco al entrenador lo que significa el Real Madrid. No podrán corregirle de la noche a la mañana, pero tienen que hacerle ver cuál es el comportamiento exigido como entrenador del Real Madrid. Creo que Casillas está mucho mejor en su papel que el entrenador. Si no tapan ese boquete de agua, se irá expandiendo hasta hundir el barco, y entonces Mourinho tendrá que salir del Bernabéu, que es lo que parece que Valdano quiere. Supongo que el Presidente no, pero con discursos de apoyo que llegan tarde y son tiritas a grandes heridas poco podrá hacer. El gran tsunami de Mourinho todavía no ha llegado. Esto sólo ha sido un aviso. Más vale que se arremanguen los directivos del Madrid y le controlen.
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